A pesar de ser una de las enfermedades metabólicas más comunes en todo el mundo, pues afecta a más de 415 millones de personas, la diabetes mellitus no ha tenido grandes avances en su terapia durante los últimos años, por lo que se espera que hoy en día presenten nuevos adelantos en la farmacoterapia que podrían cambiar drásticamente el tratamiento, y que disminuyan los riesgos asociados al uso de insulina.

La diabetes es un trastorno metabólico en el que los niveles de azúcar en la sangre se encuentran muy por encima de los valores normales por tiempos prolongados.

En condiciones usuales, estos niveles son regulados por la insulina, una hormona producida en el páncreas, pero en personas diabéticas la creación de esta hormona es inadecuada o las células del cuerpo no responden correctamente a ella, por lo que el organismo debe generar cada vez más, lo que conlleva a daños importantes.

La terapia para este grupo de desórdenes metabólicos consiste principalmente en la administración de fármacos que reduzcan los niveles de glucosa en la sangre. Actualmente las farmacias expiden varios tipos de medicamentos anti diabetes como metformina (tratamiento de primera línea para pacientes con DM tipo 2), agonistas del GLP-1 o insulina (tratamiento de elección para la DM tipo 1).

En años recientes, se han investigado y probado nuevos tratamientos para la diabetes:

  • Entre ellos los inhibidores del transportador sodio-glucosa tipo 2 (SGLT2), porque es el que más influye en la glucosuria o niveles elevados de glucosa en la orina, ya que es responsable de la reabsorción del 90% de la glucosa en los riñones y de recibir el impacto de los nuevos fármacos inhibidores, quienes logran eliminar glucosa en la orina a una tasa superior a la normal, sin afectar la función renal.
  • Otras novedades en el tratamiento de la diabetes incluyen análogos de incretinas y nuevos tipos de insulinas con mayor duración. Los análogos de incretinas son hormonas sintéticas, similares a las sintetizadas a nivel intestinal que regulan la producción de insulina y glucagón en respuesta al consumo de alimentos. Tanto el GIP como el GLP-1 actúan sobre el páncreas y estimulan la producción de insulina, reduciendo el nivel de azúcar en la sangre.

Existen 2 tipos de diabetes:

  • En la tipo 1, también conocida por los especialistas como diabetes juvenil debido a que se presenta en edad temprana, el páncreas no elabora suficiente insulina.
  • Mientas que en la diabetes tipo 2, o diabetes mellitus no insulina-dependiente, causada por sobrepeso, estilo de vida sedentario y algunos factores genéticos predisponentes, el páncreas crea proporciones adecuadas de insulina pero las células del cuerpo no responden correctamente.

Otros tipos de diabetes conocidos, pero menos frecuentes, son la denominada prediabetes y la diabetes gestacional. La prediabetes expone que el nivel de glucosa en la sangre es más alto de lo común pero no lo suficiente como para diagnosticar diabetes, situación que hace vulnerable al paciente porque podría desarrollar diabetes tipo 2. Por otra parte, la diabetes gestacional, ocurre cuando una mujer embarazada, sin ninguna historia previa de diabetes, desarrolla la enfermedad (usualmente se resuelve al término del embarazo).